Rezo de un ateo
Dios mío,
dios tuyo,
Y dios de todos:
Si tu existes realmente,
¿Por que en mi, el dolor abunda?
Mi alma anda vagabunda
presa en cuerpo presente.
Neurona moribunda
precisa amor ausente.
Para al fin hacer frente
a injurias que me confundan.
Me hallo inundado en dudas.
soy muñeco sin vida,
con ojos de homicida
que cada noche sudan.
La luna no me ayuda,
su actitud causa mella.
Llamo pues a una estrella
que a asistirme acuda.
¿No estaría usted, mi señor
libre solo un momento
para un necesitado?
Olvídelo creador
pues nunca calmó lamento
ni de quién le ha rezado.
Es un poema que está narrado en primera persona.Trata sobre como un ateo reza en algo en lo que no cree lo cual es incoherente. El tiempo es externo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario